Echiquier Space : La ùltima frontera de la inversón
Innovación rupturista, saltos tecnológicos, nuevos mercados… la economía está transformándose a pasos agigantados en este mundo en constante cambio. Una de las especialidades de La Financière de l’Echiquier (LFDE) es tratar de identificar las, tendencias estructurales que, en nuestra opinión, darán forma al mundo del mañana. Entre ellas, se encuentra la transformación profunda y fulgurante del ecosistema espacial, que abre nuevos horizontes y oportunidades de inversión inéditas. Lanzado recientemente por La Financière de l’Echiquier (LFDE), el Echiquier Space¹ es el primer fondo de selección de valores de Europa centrado en el espacio y su ecosistema empresarial y constituye una solución temática novedosa que amplía el horizonte de los inversores en busca de diversificación e innovación.
Un potencial estratosférico
La llegada del New Space, es decir, la entrada de las actividades espaciales en la esfera de la empresa privada, ha revolucionado el panorama. El desarrollo de tecnologías espaciales, diseñadas por un número cada vez mayor de start-ups y actores del sector privado, con la consiguiente aceleración de sus salidas a Bolsa, refleja la efervescencia del sector. Su potencial parece prodigioso. Con un valor actual de aproximadamente 400 000 millones de dólares², el mercado espacial debería alcanzar los 2,7 billones de aquí a 2045³, lo que constituye un vector de crecimiento colosal para la economía mundial. Este mercado está sostenido por empresas pioneras que están presentes en sectores tan diversos como la industria de los satélites de comunicación, cuyo crecimiento se cifra en el 9,2 % anual hasta 2027[4], o incluso la fabricación en órbita de satélites en miniatura o piezas de ingenios espaciales. El crecimiento previsto de esta industria de la fabricación en órbita, que reduce los costes de transporte y reutiliza los componentes ya presentes en el espacio, es del 7,5 % anual hasta 2026[5]. Así, por ejemplo, 3D Systems está especializada en imprimir en 3D piezas únicas para los satélites desde el espacio.
Un proceso de inversión riguroso
Nuestro equipo de gestión trata de seleccionar empresas internacionales innovadoras que utilizan, desarrollan o se benefician de las tecnologías espaciales. Los valores que entran a formar parte de la cartera se seleccionan de forma rigurosa. Después de identificar actores internacionales vinculados a esta temática, aplicamos un filtro de exclusiones sectoriales y normativas, así como un análisis cualitativo financiero y extrafinanciero. Procedemos a una clasificación temática de los valores de acuerdo con cuatro categorías propias:
- Empresas que llevan a cabo su actividad desde el espacio, como la observación de la Tierra, la exploración espacial o incluso la fabricación industrial en el espacio.
- Empresas que tienden puentes entre la Tierra y el espacio desarrollando sistemas de comunicación innovadores o gestionando el envío de ingenios espaciales. A este respecto cabe mencionar a Rocket Lab, que ha creado su propia plataforma de lanzamiento para enviar cohetes reutilizables y conseguir más independencia frente a Cabo Cañaveral, que gestiona el calendario de lanzamiento de cohetes.
- Empresas cuya actividad principal se encuentra principalmente en la Tierra y que posibilitan o se benefician del desarrollo de lo espacial. Es el caso, por ejemplo, de la fabricación de cohetes o satélites o incluso el desarrollo de aplicaciones a partir de datos espaciales. En este sentido, la empresa estadounidense John Deere[6] explota los datos espaciales al servicio de la agricultura de precisión.
- Empresas que desarrollan tecnologías transversales que favorecen el auge de la revolución espacial, por ejemplo programas de software de diseño industrial o de simulación o servicios de cloud computing.
¿Por qué Echiquier Space?
Para aprovechar el despegue del mercado espacial
El modelo que emerge está basado en los datos y aspira a la comercialización a gran escala de los datos espaciales, el oro negro del siglo XXI. Los datos espaciales se utilizarán en todos los sectores, desde la comunicación hasta la vigilancia de nuestro planeta, pasando por la agricultura de precisión, y dan lugar a actores como MAXAR, que ofrece imágenes por satélite que permiten cartografiar puertos, aeropuertos o lugares sensibles y agregar múltiples fuentes para detectar cambios gracias a la inteligencia artificial.
Un Código ASG[7] al servicio de la inversión espacial responsable
Desde la fase de diseño del fondo, hemos identificado los retos de una industria espacial sostenible. En cooperación con el equipo de análisis de inversiones responsables de LFDE, hemos elaborado un código específico para los retos de sostenibilidad basado en grandes principios: do not harm, diálogo con las empresas compartiendo áreas de mejora en materia ASG y transparencia frente a los clientes.
Para contribuir a los retos del desarrollo sostenible
Estamos seguros de que los datos satelitales contribuirán a resolver los grandes retos de nuestra época. Gracias al cinturón cada vez más denso de satélites que orbitan alrededor de la Tierra, los datos recopilados permiten desarrollar soluciones de prevención, de gestión de los riesgos y los recursos, reducir la brecha digital e incluso luchar contra los desajustes climáticos o preservar la biodiversidad. Por ejemplo, 26 de los 50 indicadores de seguimiento del cambio climático según la ONU proceden de imágenes vía satélite. Invertir en el mercado espacial es, por tanto, apostar por esas empresas que estamos convencidos de que contribuirán a mejorar la vida en la Tierra.